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Sin palabras suficientes, te perdono lo que no hay para perdonar
Las verdades a medias, que me dejaron ver los matices
El que rompieras mis sueños de cristal, porque como aquel, se funden y renacen, dando paso a nuevos sueños e ilusiones
Las esperanzas sostenidas sobre débiles hilos, por recordarme que pueden ser tan fuertes como el hilo de una Araña y soportar en ellas todos los males del mundo
El desespero de nunca llegar, porque me dió la perseverancia de seguir caminando y disfrutar de la ruta
Por las metas no alcanzadas, gracias a las cuales aprendí y recordé una y otra vez, que importa y aprendes más el camino recorrido que el final del mismo
Te perdono que no haya nada que perdonar, lo que me permitió alejarme, poco a poco, con el dulce sabor que deja el dar lo mejor de uno mismo y saber que se recibió lo mismo a cambio
Te perdono el espacio invadido en mi alma, porque cada vez que entregamos un pedazo de nuestro amor y alma a alguien, nos vivificamos y hacemos más humanos
Me perdono, incluso el no tener nada que perdonarte
Solo una cosa no podria perdonar... que a cambio de todo, al final te quedes con tan sólo un vacío en el corazón.. porque ya no estaré allí para llenarlo y cubrir tus heridas con mi manto, ni podré reparar nuevamente tus alas rotas